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Convierte tus costes
fijos en variables

¿Por qué externalizar?

El outsourcing de los servicios o la externalización es una de las prácticas de negocio más rentables para las empresas, ya que supone para la actividad empresarial una herramienta útil, que ayuda a incrementar la expansión y productividad de las acciones comerciales. Consiste en la contratación de una empresa externa especializada en la ejecución de servicios de producción y logística, para que dicha empresa ejecute dichas tareas.
No deben pertenecer al Core Business de la empresa principal.Debe tener sustantividad propia, aportando los medios mecánicos y conocimientos de la actividad.Debe tener bien definidas las fronteras dentro del conjunto de la actividad.
Depende del nivel de externalización que necesitemos obtendremos unos beneficios u otros, de esta manera podemos hablar de tres niveles:
  • Nivel de bajo valor añadido: aquel en el que se subcontratan tareas periféricas sin valor añadido para la empresa. El objetivo que se persigue es simplemente evitar problemas de gestión y no involucrarse en una actividad que no le da valor a la compañía.
  • Valor añadido medio: se externalizan actividades con la finalidad de tener una mejora en los costes unitarios y una mejora en el nivel de servicio. Se trata de actividades muy importantes para el correcto funcionamiento de la empresa si bien no pertenecen a su core business.
  • Alto valor añadido: se externalizan procesos con el fin de obtener plena eficacia y proporcionar un continuo valor añadido para la empresa que subcontrata, convirtiéndose en un partner útil y estratégico de diferenciación competitiva. La empresa de externalización se convierte en un socio industrial con el que generar ventaja competitiva.
  • Reducción de sus costes fijos
  • Eliminación de costes ocultos
  • Flexibilización de sus plantillas
  • Mejora en la calidad de los servicios prestados a sus clientes
  • Mayor capacidad de reacción ante los cambios que afecten al mercado
  • Etc.

La elección del proveedor de Servicios Logísticos y de Gestión, ha de ser exigente, la empresa seleccionada debe ofrecer a sus clientes las garantías necesarias adaptadas a cada tipo de negocio, así como capacidad resolutiva, fiabilidad y competitividad.

  • Conversión de costes fijos en variables: la relación contractual con la empresa se establece por unidades productivas pasando a tener unos costes globales variables en función del nivel de producción.
  • Eliminación de costes ocultos.
  • Obtención de flexibilidad ante eventuales variaciones de carga de trabajo: los picos y épocas valle en la curva de producción son asumidos por la empresa a la que se le ha externalizado el servicio.
  • Mejora de ratios financieros: se evitan gastos en otras áreas y se unifican los pagos en RRHH con un periodo de cadencia.
  • Se reduce la complejidad de la gestión del negocio: se evitan muchas pérdidas de tiempo y recursos en áreas que no pertenecen a su core business.
  • Visibilidad y transparencia: al realizarse la prestación del servicio In company se mantiene la visibilidad sobre los resultados de los procesos.
  • Mejora de la eficiencia de las operaciones: al delegar la ejecución de estas tareas a una empresa especializada, se obtiene acceso a los últimos avances tecnológicos en lo que se refiere a estas áreas, sin necesidad de generar costes adicionales.
  • Reducir los riesgos asociados al “Insource” (Inversión, pasivo, gestión de colectivos).
  • Flexibilidad adaptada a las necesidades y al comportamiento del mercado.
  • Administración y gestión más clara de los costes logísticos y de producción.
  • Disminución del riesgo inversor al asumir la empresa de servicios dichos riesgos.
  • Incremento de la productividad y de los niveles de servicio, al emplear todos sus recursos en el principal motor del negocio.
  • Posibilidad de reconversión del personal en otras áreas y amortización de los equipos del sistema logístico propio.